Catas


 
 

Gracias Luis por tus bellas palabras, gracias Mercedes, por esta foto , que tan bien refleja el vino y por otras muchas fotos tuyas que hay en este blog.

 

Notas de cata El Mundo Vino

Laurel, jazmín, anís, pastelería fina y el carácter balsámico del alcanfor y el eucalipto. Intensísimo en boca, pero con trama muy fina. Gran final, largo, algo amargoso. Un vino emocionante.



Fecha de cata: 26/07/2013



Catado por : Víctor de la Serna, Manuel Puerto, Ernestina Velasco.

 Agradable sorpresa que nos hace muy felices, gracias a los tres.

 
 
 

 
MAYU MILLER enóloga Japón Barcelona

En general es un vino elegante, noble y beautiful, con una enorme capacidad de expresarse. 
Me ha dado una sensación alegre y amable también. 
Abajo escribo una nota de cata, que no es elaborado ni sofisticado. Pero verá lo que percibí de su vino y espero que sea de su interés.

Nariz es cítrico (yuzu, una mandarina japonesa que da una acides mas redonda que limón. Es mas jugosa), mineral y una leve nota de salinidad. 
Notas de flor de azahar, fruta blanca-exótica madura (pera, lychee y al fina como de níspero), que me da alegría como el primer rayo de sol de la madrugada. 

En boca ataque agradable. 
Notas de frutos secos-hierbas gruesas de galicia (clima atlántica. sutilidad), fruta exótica madura (imagino que en verano hace bastante calor allí). 
Una combinación perfecta de acidez fina y volumen (de fruta madura y de quizás crianza sobre lías). 
Algo de humo (smoky) como los vinos de Bourgogne, pero mas maduro y savoury. 
Una leve nota de levadura (?) que a lo mejor viene de sin clarificar, que da sensación de Bio. 

Por el homenaje a las gallinas, cenamos con Teriyaki de pollo de granja con jengibre para maridar con el vino.
 
! gracias Mayu Miller !




      ¿ nos ponemos de acuerdo o que ?

 

A pita cega: el vino que nace en Lagar de Sabariz, mi “Shangri-La”


En mi último viaje a Galicia invitado por el CRDO Ribeiro, y del que dejé constancia en mis post sobre Riberio I y Ribeiro II, tenía pendiente la visita a una bodega fuera de la DO, de la que había leído y escuchado cosas interesantes sobre su filosofía de trabajo y  su vino: A pita cega 2011.
Lagar de Sabariz

Lagar de Sabariz
Así pues, y antes de iniciar las actividades organizadas por el Consejo Regulador, realicé como copiloto de Pilar Higero una escapada a Lagar de Sabariz recorriendo esas carreteras sinuosas que hacen mágica la Galicia de interior .
 
Lagar de Sabariz

Lagar de Sabariz
Llegamos a la bodega en la que ella es el “alma mater” de una pequeña explotación vitivinícola bajo la filosofía de la agricultura biodinámica y que nada más llegar describí como un “Shangri-La”, un biotopo en el que la máxima es la armonía que queda reflejada a lo largo de todo el proceso vinícola. Me sentí como  Ronald Coman en Horizontes Perdidos cuando atraviesa el pasadizo acompañado de Jane Wyatt que los conduce al paríso tibetano en el que vive una idílica y utópica comunidad . ¡Todo un privilegio!.
 
Lagar de Sabariz Bodega exterior

Pequeña hacienda rodeada de suaves colinas y bosques que la aislan de toda influencia “maligna”. El Miño a escasos 400 m. en línea recta, pero del que no llegan sus malditas nieblas. Ovejas, gallinas y ocas, romero, rosales, lavanda, hierbabuena, fresas -¡mon dieu! nunca olvidaré ese aroma a fresa de Sabariz-, Tempranillo, fiel perro guardián de vidas y hacienda, y vides de albariño y treixadura.
 
Viñas de Lagar de Sabariz 17-06-2013 11-45-03
 
Se siente la armonía y el equilibrio de la naturaleza reflejada en un vino que ha conseguido hacerse un hueco en el mundo vinícola por trasmitir una filosofía de vida dentro de una botella y apreciada en una copa excelentemente plasmado en el post sobre A pita cega 2011 de Joan Gómez Pallarès
 
A pita cega 2011

A pita cega 2011
El vino, A pita cega 2011 está elaborado con uvas de albariño, treixadura casi al 50% y otras bajo cultivo biodinámico provenientes de 4 ha. en Sabaríz (Orense) situadas en suelos ácidos, sueltos y bien oxigenados que Pilar define como “viticultura de granito”,  que se vinifican por separado y se crian durante 2-3 meses con sus lías finas, realizando una estancia de un año en depósitos de acero inoxidable. 13,7% vol. Botella totalmente reciclable y eliminación de la etiqueta en favor de tinta vegetal no contaminante. El respeto por el medio ambiente llevado a su máxima expresión.
 
La cata:
El vino en vista se muestra amarillo pajizo con menisco alimonado. Lágrima fina y densa. Untuoso en agitación.
Nariz que va evolocionando con el tiempo iniciando un predominio de notas frutales (manzana) y continuando con el aporte de aromas cítricos y minerales. Sutiles florales (lavanda).
En boca muestra una muy buena acidez. Untuoso, envolvente, largo, con ese punto de amargor que lo hace adictivo. Elegante y muy disfrutable.
A pita cega 2011 ha sido elegido hace unas semanas como el mejor vino blanco del año 2013 para la web especializada www.elmundovino.com y por mi parte, unos meses antes, en las útlimas navidades, lo incluí en mi lista de “top ten” del año 2013 en la web www.prwinenews.com con la que colaboro.
Si tienen ocasión, pruebenlo, mejor dicho, disfrútenlo porque no les dejará indiferentes, y si quieren comentar sus impresiones están en su casa, están en su blog.
¡Salud y buen vino!
 
 
Gracias Mario Estévez.
 
 
 
 
Juan Cuatrecasas Asua
 Adega Lagar de Sabariz A Pita Cega 2011 
 



 Mi agradecimiento a la bodega gallega Lagar de Sabariz 
Para dar cobertura a la crema, seleccioné este vino también muy natural, elaborado con procentaje mayoritario de treixadura y albariño, y menor aporte de otras castas varietales.
Con el mimoso mando de la enóloga Pilar Higuero, estamos delante de un vino que aporta una buena dosis de frescura, que acredita un año de estancia en depósitos de acero inoxidable, y cuyos frutos proceden de parcelas cultivadas de modo biodinámico, y de viñedos jovenes asentados sobre suelos de composición rocosa y cuarzo. El proceso de vinificado se realiza de modo individual, en relación a cada casta varietal empleada, acreditando un periodo de dos a tres meses de crianza en depósitos de acero inoxidable con aporte de sus finas lías.
Permanencia en depósito de vendimia a vendimia.
Es un vino que aporta en copa parada un color amarillo limpio y brillante con reflejos verdosos. Nariz de buena complejidad, aportando recuerdos de fruta cítrica, blanca con hueso, y manzana, dejando para la segunda línea un marcado componente floral, balsámicos y una sugerente nota final de mineralidad.
La boca apunta una excelente seña de sapidez, arrancando con la pulposidad de la fruta madre, bien presente; y dejando en el avance una traza de frescura muy bien delineada, que despliega lozanía y notas de buena expresion, llena la boca, acaricia el paladar. Es franco y longitudinal, marcando una seña de persistencia de buena amplitud, con una textura suave y complaciente y un fino amargor que prolonga su peso en la cata. En la amplia nota de evocaciones retronasales, apunto en primer plano limón y pomelo, manzana golden, melocotón de viña, ciruelas claudia, señas de hinojo, anisados, gengibre, hierba fresca y en el perimetro y final, una amplia distinción de mineralidad, que recrea recuerdos salinos, de roca húmeda, como si el vino no quisiera despedirse de nosotros. Es profundo, sabroso y una copa pide otra más.
Me ha encantado.
Lo califico en esta añada 2011 como más que muy recomendable, necesario, dotado de viveza y mucha personalidad.
Una buena armonía con la que ustedes gozarán como auténticos sibaritas.
 
 
Gracias Juan Cuatrecasas
 
 

A Pita Cega 2011
Cata de Juan Antonio Ayerbe
Vino sin D.O. elaborado por la bodega Lagar de Sabariz (Ourense). Se trata de un blanco con estancia de 1 año en depósitos de acero inoxidable, elaborado a partir de uvas Treixadura y Albariño al 50%, con pequeñas aportaciones de otras castas. La graduación alcanza el 13,7%. Las botellas son ecológicas y de bajo peso con corcho natural procedentes de bosques protegidos. Salen 7.000 botellas.
Elaboración:
Las uvas proceden de 4 Ha trabajas en biodinámica certificadas por Craega, viñas jóvenes asentadas sobre roca madre de gran dureza y grandes cantidades de cuarzo que producen muy poca uva, pero muy sana. Se vinifican las castas por separado y se crían durante 2-3 meses con sus lías finas. Permanecen en depósito hasta la vendimia siguiente.
Valoración del Sumiller:
Primera añada que se comercializa y gran éxito de este gran vino que no deja indiferente a nadie. Es un vino franco que despliega una sinfonía de aromas florales y frutales propios del entorno del viñedo, flores silvestres, mentas, acacias, alcanfor,  flor de azahar, lavandas, albaricoques y ciruelas claudias son solo algunos de los aromas primarios que despliega A Pita Cega. En boca tiene un paso untuoso, amplio, con estructura y buena acidez con final amargoso que lo hace adictivo.
Armonías:
Comida oriental japonesa, pescados y mariscos.
Recomendaciones de servicio:
Servir a 8 ºC
Nota de cata:
Vista: Color amarillo pálido con reflejos verdosos, limpio y brillante.
Nariz: Compleja paleta aromática, con numerosos aromas a flores y frutas  silvestres.
Boca: Graso, untuoso, sabroso, mineral, con buena acidez y final amargoso.

Gracias Juan Antonio. Espero que pronto volvamos a dar un paseo por la viña.

 

Notas de cata de Cistina Codesido, enóloga

Cristina Codesido, enóloga e impulsora de Platú, primera marca gallega de bebidas espirituosas Premium, nos visitó hace unos días en el viñedo y nos dejó sus notas de cata sobre A Pita Cega...

FASE VISUAL: En copa muestra tonalidad pajiza con ribete verdoso, que hace destacar la frescura que posteriormente se apreciará en fase olfativa y gustativa.

FASE OLFAVITA y GUSTATIVA: En nariz se muestra potente y complejo. Se desnuda, mostrando una sutil carga a fruta madura de hueso (albaricoque, melocotón), fragancias a plátano de media maduración, notas mielosas, cítricos elegantes (pomelo rosa) y flores blancas (campo de acacias). Las sensaciones de dulces que percibimos en nariz no se expresarán en primera instancia en boca, pues debido a su complejidad, inicialmente mostrará más los componentes minerales y los frutales (cítricos). Su tacto es ligero y bien conjuntado, con una exquisita acidez que realza el vino hasta el trago final, momento en el que aparece la fruta en forma de melocotón. Destacamos un final perfecto. Se percibe un trabajo tan artesanal y mimado, que se traduce en un VINO BLANCO MUY CONCENTRADO Y COMPLEJO A LA VEZ QUE DELICADO.

¡Agradecemos enormemente su visita y esperamos verla de nuevo por aquí! 
Gracias Cristina.






Tras una visita improvisada a nuestras viñas, Daniel Marín, tercer puesto en el Campeonato Gallego de Sumilleres 2012 , recoge sus impresiones en su blog Ivinourense:. Sumiller


A Pita Cega

Una iniciativa diferente que nace en Sabariz Ourense en un entorno mágico lleno de vida, repleto de frutales, castaños, pinos, lavanda y hermosas flores, es un vino que surge del corazón de las viñas de la bodega Lagar de Sabariz.

Siempre es una grata emoción encontrar vinos rompedores creados silenciosamente mirando siempre a la viña y no a las modas del mercado. Es un proyecto en el que destaca principalmente el trabajo en la viña donde para conseguir un suelo sano, vivo y equilibrado se trabaja con técnicas de cultivo orgánico respetando el medio ambiente y retomando métodos tradicionales en el viñedo con la mínima manipulación humana y tecnológica con el fin de conseguir un vino que transmita todos aquellos aromas olvidados.

Lagar de Sabariz tiene en su propiedad 4 hectáreas de viñedo en las que se cultivan las variedades Treixadura y Albariño. Pese a las condiciones climáticas tan difíciles y los bajos rendimientos de producción se trabaja de manera natural tanto es así que cuenta con la certificación del consejo regulador de agricultura ecológica de Galicia.

A pita Cega 2011 es un vino sensible que se podría definir en pocas palabras como el entorno de donde se extraen sus uvas, es único y sorprendente, en nariz se muestra delicado en las que se van apreciando las fragancias como pera, flores, piel de cítricos, hierbas aromáticas y sobre todo mucha sensación de tierra. En boca es armonioso y equilibrado por su fresca acidez.

Gracias Daniel.