Así trabajamos



Cultivamos de forma orgánica, biodinámica, 4 ha de viñedo, además de huertas, bosques y praderas, donde pacen vacas, ovejas, gallinas y  ocas. Para lograr el equilibrio de este organismo vivo cuidamos las cepas con infusiones de hierbas de la propia finca y con los 8 preparados biodinámicos, de forma homeopática y siguiendo los ritmos del calendario lunar y astrológico.
Y con una sola idea:
Respeto, respeto por la tierra, y sus miles de años de evolución y armonía.

La palabra biodinámica viene de bios (vida) y dynamis (energía), más que un método de cultivo es una forma de vida, desarrollada a principios del siglo XX, por Rudolf Steiner, que en esencia busca devolver la vida biológica  a la madre tierra, para que traslade su vitalidad al viñedo.
Nuestros suelos son pobres pero muy vivos, el rendimiento es escaso.





En Biodinámica se trabaja de acuerdo con las energías (en el sentido místico de la palabra) que crean y mantienen la vida. En cuanto a la viticultura, es un método mas moderno; se empezó a emplear en Francia en los años 80, siendo Nicolás Joly su gran impulsor.  Las normas son similares a las de la agricultura ecológica: rotaciones de cultivos, compost elaborado con estiércol de la propia granja y utilización de recursos naturales para el control de malas hierbas y enfermedades. Aplicación de los preparados biodinámicos. Asimismo y debido a que un monocultivo es una fuente inagotable de problemas, se establecen corredores biológicos, para minimizarlos.

 
En esencia, lo que se busca es devolver la vida biológica al viñedo y conectarlo con su entorno sin emplear ningún tipo de herbicidas, fungicidas o insecticidas químicos ( no olvidemos que cida significa muerte y la biodinámica crea vida) y evitando los volteados de tierra, que perturban los millones de microorganismos que esta contiene. las plagas sólo aparecen cuando las tierras sufren algún desequilibrio

 
En la búsqueda de la biodiversidad, el viñedo,  está rodeado huertos, de lavandas, mentas, romero, rosas, amapolas, ciruelos, melocotoneros etc, todas ricas en polen y fruta, dan refugio y alimento a distintas especies, animales, estableciendo una lucha biológica y facilitando la autorregulación del viñedo
Se llaman corredores biológicos.
En menos palabras son carreteras floridas por donde circulan multitud de bichos que nos ayudan en la viña
 ¡Al personal hay que darle comida y cama






Vacas, ovejas, cabras, gallinas ! como no ! y ocas, ayudan en la limpieza de las viñas y aportan gran cantidad, de estiércol para el compost
 

 

Disponemos de la certificación del Consello Regulador de Agricultura Ecolóxica de Galicia, que avala la no utilización de  productos químicos o de síntesis.

Elaboramos el vino desde el viñedo y actuando con sutileza, entregamos al vino, la personalidad de la tierra que lo alberga.
Vino de terroir, vino de paisaje.

UN PROYECTO SOSTENIBLE
Nuestra idea de proyecto sostenible no acaba en el viñedo, hemos trabajado mucho para reducir al máximo la huella de carbono que a día de hoy es prácticamente inapreciable, según el estudio comparativo realizado por  la Facultad de Químicas de Santiago de Compostela, estamos en torno a los 60 gr CO2/ litro de vino, eso dice de nosotros que somos limpios, y no es mas limpio el que mas lava, si no el que menos ensucia, con la plantación de 20  castaños intentamos compensar, le llamamos el bosquecito del secuestro, pero seguiremos trabajando para dejarla en cero.


 Dinamizar

Dinamizar en biodinámica es sinónimo de removido:

Para dejar en libertad las fuerzas absorbidas por los preparados y transmitirlas al agua, convirtiéndola en portadora de energías. 

De vez en cuando invertimos el sentido del removido, crean...do un gran vórtice, dinamizaremos 20 minutos o 60 minutos en el caso del 500 y 501.

Las cantidades pequeñas necesitan el mismo tiempo que las grandes.


El tiempo que el agricultor dedica al removido debe ser un tiempo de reflexión serena, que sin duda sabrá aprovechar, debe hacerse, con suavidad, de modo rítmico y a una velocidad moderada.


Y hasta aquí todo está muy bien:


Saco mi cuba de madera, la escoba de abedul, y me dispongo a pasar un rato, 60m fantásticos de relax y meditación, amanece, el sol sale por detrás de la viña…. ¡para 4 ha necesito 240 litros de agua! sale fresca el agua del manantial, debería estar tibia....yo que soy bajita y mas bien poca cosa, introduzco la escoba, en el agua, doy una primera una vuelta, con brío, el agua se mueve algo, poco, otra vuelta, parece que el agua se empieza a organizar, en cuanto pasen unos minutos cambio el sentido, hago el gran vórtice.


¿Qué? El agua no está dispuesta a obedecer, y yo como bruja peleando por su escoba voy al ritmo del agua, que me arrastra sin remedio. Van 15 minutos, solo he conseguido un giro, a cambio sudo como un pollo, la cara me chorrea de salpicaduras, este 500 de bosta de vaca, me va a dejar el cutis como una rosa de mayo, reflexiono serenamente, mientras intento ganar la pelea contra las fuerzas centrifugas en se ha convertido mi dinamización. Resoplo, un giro mas, un esfuerzo mas, 45m, me asomo a la cuba, todo está bajo control, se caen las gafas dentro…a ver si con la escoba las pesco.


Vaya, que no aparecen, ¡pues si que estamos bien! las fuerzas de los preparados se han aliado contra mi, revuelvo el fondo, nada, no veo ni torta ¡zas!


La escoba, que a estas alturas ya tiene vida propia, se suelta de mi mano y desaparece por arte de magia, por el centro del ansiado vórtice.


Meto la mano hasta el codo, no está, hasta el hombro, rebusco en el agua, de puntillas, a ver si logro pillarla, la cuba se balancea peligrosamente, levanto un pie, con la punta de los dedos toco el mango, estirándome al máximo la agarro con fuerza ¡te pillé! la cuba, en último intento por la estabilidad, se vuelca, rodamos juntas, abrazadas, recibo, con serenidad las energías liquidas del preparado de mierda en cuerno de vaca, aunque la velocidad no es moderada, y el ritmo se ha perdido definitivamente. 


Me siento, sobre la tierra empapada de vitalidad, retiro el pelo chorreante de mi cara, vacío las botas, rebosantes de agua energética, apoyo la cabeza en la cuba, me agarro a la escoba con fuerza, la reflexión serena, me ha sentado divinamente, el tratamiento biodinámico empieza a hacerme efecto, los planetas desde arriba me bendicen, la luna llena a punto de irse a la cama me guiña ojo, relax total.


Las gafas han desaparecido para siempre.